“Si no me duele nada, ¿para qué voy a ir al fisio?” Probablemente hayas pensado alguna vez cuando un amigo o familiar te lo haya recomendado. Está feo que nosotros lo digamos, pero hasta cuando crees que no, nos necesitas, y aquí te contamos por qué.
Normalmente los pacientes acuden a nosotros cuando ya no les queda más remedio… Sin embargo, la fisioterapia tiene una función preventiva: te puede ayudar a corregir posturas, a mejorar tus entrenamientos y a prevenir lesiones de todo tipo. Es preferible acudir a sesiones de fisioterapia cuando se tienen leves molestias que no llegan a tener la gravedad de una lesión o incluso, simplemente, ir para descargar los músculos de las tensiones diarias. Además, podemos proporcionar una mayor movilidad en músculos y articulaciones y evitar que dolores agudos se vuelvan crónicos.
Además, parte de nuestro trabajo incluye la labor de proporcionar a los pacientes información acerca de la salud, ofreciendo por ejemplo ejercicios complementarios para mejorar sus dolencias o advirtiendo de posturas inadecuadas que debemos corregir. Pero, el motivo más importante para acudir es que siempre es mejor prevenir que curar. Las medidas preventivas hacen que los daños finalmente sean infinitamente menores. Tener información, tratamiento, asesoramiento y entrenamientos adecuados hacen que evitemos lesiones y otros problemas en nuestro día a día.
Ponte en nuestras manos, no te arrepentirás.
Por eso, en FisioVen ofrecemos fisioterapia preventiva, pero si ya te has lesionado, no te preocupes porque tenemos atención especializada en lesiones deportivas y rehabilitación. No dudes en contactar con nosotros en el 605 665 853 o reservando directamente aquí.